Antes de someterte a una rinoplastia, es importante que tengas en cuenta lo siguiente:
- Busca un cirujano calificado y experimentado en rinoplastia, idealmente con amplia experiencia en cirugía funcional como estética de la nariz. Asegúrate de revisar su historial de casos exitosos y su certificación en cirugía plástica.
- Haz una consulta previa con el cirujano y habla sobre tus expectativas y objetivos con la rinoplastia. El cirujano debe ser honesto contigo acerca de lo que es y no es posible.
- Prepárate para la recuperación. La rinoplastia puede requerir un tiempo de recuperación prolongado. Asegúrate de seguir las instrucciones de tu cirujano sobre la actividad física, la alimentación y el cuidado de la herida para una recuperación óptima.
- Comprende los riesgos y las complicaciones potenciales de la rinoplastia. Estos pueden incluir infecciones, sangrado, cambios en la sensibilidad, problemas respiratorios y resultados insatisfactorios.
- Considera el tiempo que te tomará recuperarte completamente. Es posible que debas tomarte un tiempo libre del trabajo o de las actividades cotidianas para permitir que tu cuerpo se recupere adecuadamente.
- Comunica cualquier problema de salud que tengas con tu cirujano. Algunos problemas de salud pueden aumentar el riesgo de complicaciones durante la cirugía o la recuperación, y es importante que tu cirujano esté informado de cualquier problema de salud que puedas tener.
Recuerda que la rinoplastia es una decisión importante y personal. Asegúrate de estar informado y preparado antes de comprometerte con la cirugía.